Elena Canorea
Communications Lead
Aunque muchas empresas lo pasen por alto, la arquitectura de datos es una de las facetas más importantes del panorama tecnológico empresarial. Durante los últimos años ha ido ganando importancia y transformándose impulsada por la IA, el Big Data y una mayor demanda de procesamiento de datos en tiempo real.
Las tendencias en data y las previsiones de futuro en la arquitectura de datos dejan ver un momento que promete redefinir la forma en la que gestionamos los datos y la forma en la que se toman decisiones empresariales.
Con nuevas tendencias como el procesamiento de datos en tiempo real, la malla de datos y el análisis avanzado, la arquitectura de datos se va a convertir en un factor clave transformador y disruptivo. ¡Te contamos todos los detalles!
La arquitectura de datos está evolucionando para ofrecer autoservicio de datos habilitados por metadatos.
Las mejores prácticas para una arquitectura de análisis de datos eficiente han ido evolucionando desde las últimas décadas, impulsadas por la transformación digital y la necesidad de modernizar las estrategias y aprovechar los datos para conseguir más beneficio empresarial.
Según Gartner, la distribución cronológica quedaría así:
La democratización del acceso a los datos y el análisis de autoservicio está impulsando la evolución hacia una era de los metadatos activos. Estos ampliarán los casos de uso más allá de los que facilitan los LDW, desde gestión de datos maestros, intercambio de datos entre empresas, integración de datos B2B, intercambio de datos de socios, integración de datos de aplicaciones, etc.
Estos metadatos describen diferentes facetas de los datos, como si fueran un subproducto del movimiento de datos a través de los sistemas empresariales. Hay cuatro tipos: técnicos, operativos, comerciales y sociales. Cada tipo puede ser metadatos “pasivos” que las organizaciones recopilan, pero no analizan activamente, o “activos” que identifican acciones en dos o más sistemas que utilizan los mismos datos.
Data Fabric es un concepto emergente de diseño de integración y gestión de datos, cuyo objetivo es lograr una integración de datos flexible, reutilizable y aumentada para respaldar el acceso a los datos en toda la empresa.
La estructura de datos ha sido una evolución natural para las empresas, desde sus modelos lógicos de almacenamiento hasta la modernización de la arquitectura aprovechando la tecnología y los metadatos.
Este enfoque ofrece numerosos beneficios desde diferentes perspectivas:
Con todo ello, los factores que determinan si el diseño de la estructura de datos es adecuado para cada caso son: la integridad de los metadatos y la experiencia en la estructura de datos dentro de la organización. Las que apenas cuenten con metadatos tendrán muy difícil encontrar beneficios, así como verán un aumento de dependencia de expertos que ayuden a descubrir, inferir o crear metadatos.
La malla de datos adopta un enfoque de arquitectura que permite la gestión de datos descentralizada. Su objetivo es definir, entregar, mantener y gobernar productos de datos de manera que los hagan fáciles de encontrar y utilizar por parte de los consumidores de datos.
Por ello, la arquitectura de Data Mesh se basa en descentralizar y distribuir la responsabilidad de los datos a las personas más cercanas a estos y compartirlos como un servicio.
Ofrece numerosos beneficios, como una mayor autonomía para las líneas de negocio, menos dependencia de la IT central o la rotura de los silos gracias a la descentralización de los datos.
El éxito de esta arquitectura dependerá del modelo organizacional y las habilidades de datos en las líneas de negocio. ¿Cómo funciona esto? Si el conocimiento de los datos, la autonomía y las habilidades en materia de datos no son consistentes y varían mucho según el departamento o la organización lo pueden poner las estrategias en marcha, la IT central dará más soporte.
Bien aplicada, las líneas de negocio pueden evolucionar hacia una mayor autonomía dentro de un entorno de malla de datos mediante la creación de nuevos roles para gestionar la definición, creación y gobernanza de los productos de datos. Siempre y cuando se tengan el compromiso de desarrollar habilidades de datos distribuidos.
La malla de datos transfiere la responsabilidad del gobierno de los datos a los diseñadores y usuarios de aplicaciones de dominio, por ello, para que una línea de negocio cree y exponga productos de datos de forma autónoma, debe definir la gobernanza y la gestión de datos locales que cumplan con la orientación central del CISO y el CDO.
Es una buena opción para las organizaciones que cuentan con metadatos incompletos. Siempre y cuando cuenten con arquitectos de datos con experiencia en la materia que puedan comenzar con esta arquitectura y construir almacenes de metadatos activos en paralelo.
La flexibilidad es una de las características más buscadas en cualquier organización que esté en plena digitalización y quiera superar los retos de la complejidad de los entornos modernos.
En un momento en el que trabajamos con entornos locales, cloud, multinube, híbridos, etc., las compañías necesitan revisar su estrategia para contar con una arquitectura de datos sólida y planificada. Solo así se garantizará que las nuevas tecnologías que se implementen serán coherentes con la infraestructura existente y puedan soportar demandas futuras.
La clave para conseguirlo pasa por 4 pilares:
Según McKinsey, hay tres factores fundamentales que están impulsando el crecimiento económico en referencia a los datos: ventajas competitivas para compañías impulsadas por la tecnología y los datos, retorno mayor en empresas que invierten continuamente en innovación y el potencial económico de la IA generativa para la creación de nuevos casos de uso.
Todo ello demuestra la importancia de los datos como impulsor de este conocimiento, sin los cuales no se podrá el buen funcionamiento del resto de tecnologías. Por ello es tan importante que los líderes de decisión viren hacia un modelo de data driven. Para ello, se pueden implementar algunos cambios en la organización como:
Cambios como los mencionados anteriormente tendrán resultados muy positivos en la organización. Sin embargo, muchas empresas fracasan a la hora de traducir estas buenas prácticas en acciones concretas y tangibles. El cambio debe ser amplio y profundo, comenzando con el desarrollo de una hoja de ruta clara que priorice los dominios de valor e identifique las fuentes de datos que pueden impulsar las soluciones necesarias.
El diseño de la arquitectura de datos es fundamental para crear una visión de las interacciones que se producen entre los sistemas de datos, además de describir el tipo de estructura para administrar los datos de forma sencilla y facilitar el preprocesamiento de datos.
En Plain Concepts te ayudamos a definir tus requisitos y directivas empresariales, tecnologías en uso, economía y necesidades de procesamiento de datos para gestionarlos de una forma eficiente a través de una arquitectura que te haga alcanzar tus metas.
Nuestro objetivo es abordar el reto de la estrategia digital y de datos desde un prisma empresarial con el que podrás obtener beneficios, usando un marco estructurado acorde con tus necesidades.
Con este enfoque, definimos la estrategia digital y de datos necesaria a través de un proceso de inmersión, madurez y consolidación, trabajando en la generación de beneficios a corto plazo que de credibilidad a esta estrategia.
Si quieres empezar ya a convertir tus datos en información práctica gracias a las últimas tecnologías de arquitectura, almacenamiento y procesamiento de datos, ¡contacta con nuestros expertos y comienza ya tu transformación!
Elena Canorea
Communications Lead