Elena Canorea
Communications Lead
Las nuevas tecnologías transforman la forma de entretener en momentos de ocio o diseñar acciones para que los clientes empaticen más con la marca. Una de las tecnologías que ofrece posibilidades más atractivas es la realidad aumentada (AR), que se puede aplicar a los más variados sectores. Así, la realidad aumentada y la experiencia de cliente están relacionadas de manera muy fuerte.
En este post te contamos en qué consiste la realidad aumentada, una de las tecnologías más disruptivas y atractivas para numerosas industrias, y cómo se aplica para mejorar la experiencia de cliente.
La realidad aumentada (RA, augmented reality o AR) es una tecnología para visionar en 3D, tiempo real y mediante un dispositivo (como un teléfono móvil o una tableta) una parte de la realidad con grafismos u otros elementos visuales.
Las aplicaciones de la realidad aumentada alcanzan numerosos sectores, con clientes muy diferentes pero que pueden prestar el mismo interés a esta tecnología.
Estos son solo algunos ejemplos de realidad aumentada, aplicados a diferentes industrias:
En este artículo nos centraremos en ideas de realidad aumentada que se apliquen al sector minorista, con los objetivos de atraer y fidelizar clientes.
Cuando una persona ejecuta una experiencia de realidad aumentada, la decisión de compra se ve alterada de la siguiente manera:
Mediante un smartphone o una tablet, los vídeos con realidad aumentada resuelven problemas de forma muy veloz en profesiones que antes requerían de presencialidad. Son ya muy conocidos los ejemplos de realidad mixta aplicada en el diagnóstico de enfermedades, pero una videollamada en directo con realidad aumentada también puede ayudar, por ejemplo, a la hora de elaborar el atestado de un seguro, o para explicar a un albañil o fontanero un problema doméstico antes de que se acerque a casa.
Los vídeos de realidad aumentada también sirven a los clientes para imaginarse, como ya hemos visto antes, si les queda bien una prenda de ropa virtual o cómo sería con muebles una casa vacía.
Con el diseño de experiencias de realidad aumentada ayudamos a tomar mejores decisiones de compra. Para quienes dudan al adquirir un producto en un comercio electrónico, se les abre la posibilidad de ‘interactuar’ con el objeto y tomar una decisión a partir de ahí.
El packaging de cartón o plástico también se puede digitalizar y vincular lo tradicional con novedades asombrosas. Los códigos QR que tanto protagonismo han recuperado durante la pandemia sirven aquí para aumentar la experiencia del producto. Por ejemplo, dando información extra (valores nutricionales, composición del producto, recetas que preparar con él…), o desplegando videojuegos que conviertan el consumo en una experiencia gamificada.
Acciones antes descritas como comprar muebles y ropa son ejemplos de realidad aumentada y pueden contar con el clásico vendedor (o uno digital) que complementa la experiencia y ayuda al cliente a terminar la transacción de producto: recomendaciones de productos similares, tamaños del mobiliario, explicación del funcionamiento…
La diferencia entre la realidad aumentada y la realidad virtual en la experiencia de cliente es que esta última necesita de un artefacto específico (gafas como las HoloLens, guantes, cascos) para que los usuarios entren en un entorno inmersivo más allá del mundo real. Bien ejecutada, la acción puede conseguir los mismos resultados de emoción y vínculo que una de realidad aumentada.
En Plain Concepts conocemos la importancia de ofrecer al cliente las tecnologías más innovadoras. La realidad aumentada es una de las tecnologías que nos ayuda a conseguir este objetivo.
Tras una primera reunión con el cliente, en la que recogemos los requisitos del proyecto, asignamos al proyecto un equipo multidisciplinar, que elabora un backlog según los requisitos, y se realiza una oferta.
Después de la aprobación del cliente, se realiza una reunión de Kick-off, en la que se presenta al equipo que realizará el proyecto y la planificación dividida en fases de diseño y desarrollo, así como un calendario de fechas.
En las primeras fases, nuestro equipo de UX/UI elabora una interfaz virtual donde tengan cabida los requisitos expuestos por el cliente. Además, diseña la mejor forma de interactuar con ella. Este proceso es iterativo y validado por el cliente.
A continuación, nuestro equipo de desarrollo realiza la implementación del producto, dividida en varios hitos. Los clientes participan activamente con revisiones de las continuas actualizaciones y validando cada uno de los hitos hasta llegar al resultado deseado.
Exprime todas las posibilidades de la realidad aumentada para llevarla a la experiencia del cliente
Un minijuego con el que estrechar el vínculo de la marca, más información sobre el producto, probar las medidas de un mueble o el talle de una prenda de vestir… Las posibilidades de la realidad aumentada son múltiples y enfocadas a públicos muy diferentes. Escríbenos y te contamos cómo exprimir todo su valor.
Elena Canorea
Communications Lead