Recruitment en el sector tech: selección en remoto y test de código

Hoy nos adentraremos en una de las piezas clave del funcionamiento del sector Tech: el mundo del recruiting y de las pruebas técnicas para contratar a developers. Nuestra intención es mostraros la rápida evolución de este sector en los últimos años y sus procesos de tecnificación y objetivización.

Empezaremos analizando los mitos y problemas clásicos asociados con el trabajo del recruiter (quien busca, para una empresa Tech, al candidato ideal), y acabaremos analizando las últimas tendencias y novedades en este sector que, cada vez, busca identificarse con conceptos científicos y técnicos. Como por ejemplo el caso de Rviewer y sus pruebas de código.

El recruitment en sus inicios: Procesos y problemas

Los procesos tradicionales de sourcing de developers plantean muchos problemas. Hace años que vienen siendo completamente ineficientes porque: 

• Las empresas filtran con una simple llamada telefónica y sin evaluar bien el potencial del candidato al que pretenden contratar.
• Las pruebas técnicas que realizan las empresas son largas y farragosas, y no suelen dar feedback al candidato. 
• Existe un cuello de botella entre el departamento de Recursos Humanos y el de Tecnología a la hora de validar las pruebas técnicas, por lo que el proceso de selección se retrasa mucho.
• Suelen apostar por un único candidato. Al ser un mercado con mucha demanda de candidatos, si su candidato falla, ya no tienen alternativas a las que recurrir.

La búsqueda del candidato ideal

En cuanto a la búsqueda de candidatos, con buenos métodos de investigación y una amplia red de contactos, un buen recruiter puede dar, finalmente, con varios developers que hagan match con los requisitos del puesto de trabajo y que estén dispuestos a dejar su puesto actual.

Pero aquí es donde empiezan los problemas que comentábamos: ¿Cómo evaluar al candidato y no fallar en el intento?

Validación del candidato ideal: método de la vieja escuela

En el proceso de sourcing esta es la parte más compleja: aquí es necesario validar que el developer tiene el conocimiento y la experiencia técnica suficiente para poder ocupar el puesto de trabajo que se requiere. A diferencia que en otros sectores, es complicado validar esto únicamente observando el currículum. 

En este punto, habitualmente, son las propias empresas las que diseñan pruebas técnicas a medida. Con estas pruebas comprueban si los candidatos presentados por los recruiters son válidos para el puesto de trabajo.

La creación de la prueba técnica conlleva destinar un tiempo importante a su elaboración, a cargo del departamento de tecnología de la empresa. A su vez, una vez completadas las pruebas por los candidatos, requiere de un proceso de corrección, validación y selección que puede prolongarse en exceso, sin estar garantizada la contratación de ninguno de los pretendientes.

Es aquí donde entran en juego los nuevos y actuales servicios de recruiting, más técnicos y optimizados, pensados para agilizar los procesos y reducir los márgenes de error.

Nuevos métodos de búsqueda y selección del candidato ideal

Plataformas como Rviewer, Codility o Codesignal han indagado en los problemas aquí comentados y han propuesto, en los últimos años, soluciones que permiten:

• Agilizar los procesos en términos de tiempo
• Mejorar y optimizar los procesos de prueba técnica en remoto
• Ofrecer feedback y ventajas a los candidatos que realizan la prueba técnica
• Buscar formas de objetivar los métodos de contratación
• En esencia, minimizar el margen de error en los procesos de contratación

El caso concreto de Rviewer, al detalle

Un ejemplo claro de mejora frente a los procesos tradicionales lo vemos en Rviewer. Esta empresa ofrece pruebas técnicas creados por personalidades destacadas del mundo Tech y orientadas a problemas del mundo real. 

Se trata de pruebas con un punto de storytelling que permiten evaluar los skills de un candidato para un determinado lenguaje de programación o framework. Como resultado, Rviewer evalúa a los candidatos a través de un desafío técnico y elabora un “Report” con la valoración de sus hard skills. De esta manera, reemplazan todos los procesos de creación, difusión y corrección de las pruebas técnicas por parte de las empresas, permitiéndoles dedicar tiempo y esfuerzo únicamente en aquellos perfiles que cumplen con sus necesidades técnicas.

Ventajas de los test de código unificados

Al tener los test de código únicos, cuando una empresa quiere evaluar a sus developers, puede disponer de otros developers evaluados para comparar su rendimiento, o incluso para contactarlos. Disponer y utilizar pruebas de código unificadas tiene principalmente dos ventajas: 

• Estandarización de las pruebas: con una prueba técnica unificada y creada específicamente para resultar atractiva a la par que exigente, se pueden evaluar a múltiples candidatos sin que la empresa deba hacer esfuerzos añadidos.
• Ampliación de las posibilidades de contratación: Como las pruebas técnicas son estándares y acceden a ellas muchas empresas, es posible encontrar ya de entrada a un pool de candidatos evaluados, ver sus reports y contactar directamente con ellos.

De esta manera, una empresa que tiene una posición abierta puede validar los skills de sus candidatos en menos 48 horas con test de código unificados y, a su vez, acceder directamente a candidatos disponibles que (a priori) cumplan con los requisitos.

La labor del recruiter aquí sigue siendo importante, al acompañar en todo momento a la empresa en el proceso de selección y al llevar la parte humana del contacto.

Conclusiones: un sector en continua evolución

Como vemos, el proceso tradicional está cambiando hacia procesos donde prima el elemento técnico y la posibilidad de escalar las posibilidades de contratación y el número de candidatos.

El recruiter sigue siendo un elemento importante en todo el proceso de selección, pero la empresa puede asegurarse, además, un volumen mayor de candidatos y un método de evaluación optimizado para cada caso. En esencia, aplicación de datos, tecnología y optimización en un sector que cada vez se vuelve más exigente.