Elena Canorea
Communications Lead
¿Sabes poco o nada de programación web? ¿Piensas que es necesario para contar en tu empresa con una gran página web u otros servicios digitales (aplicaciones, chatbots…), o que una gran cantidad de código ralentiza la entrega de estos? ¿Crees que eso es una piedra en el camino para tu negocio? No te preocupes: en este post te contamos qué son el low-code y el no-code y sus ventajas para tu compañía.
El low-code es un sistema de desarrollo de soluciones digitales de software con una cantidad mínima de código, muy sencilla de programar.
Según la consultora Gartner, el mercado mundial de tecnologías de desarrollo de low-code crecerá casi un 20% en 2023. En concreto, tendría un valor de 26.900 millones de dólares, un 19,6% más que en 2022. El impulso de la hiperautomatización ayudará a estimular estas herramientas hasta 2026. Según Varsha Mehta, Senior Market Research Specialist en Gartner, «las organizaciones recurren cada vez más a tecnologías de desarrollo de low-code para satisfacer las crecientes demandas de entrega rápida de aplicaciones y flujos de trabajo de automatización altamente personalizados».
Por su parte, el no-code es un sistema de programación sin código. Como el low-code, permite publicar con mayor rapidez páginas web, apps o chatbots. Además, es de fácil acceso y uso para empleados sin ningún conocimiento de programación, conocidos como desarrolladores ciudadanos, aunque también lo pueden usar y extender desarrolladores profesionales.
Una clave en el desarrollo de software no-code son plantillas prediseñadas, que permiten tener en minutos una landing page o un chatbot sencillo para tu negocio. En este sentido, plataformas como Blogger y WordPress llevan décadas ayudando a los internautas sin conocimientos técnicos a tener su propio blog gratuito, gracias a unas plantillas a las que se pueden añadir elementos como widgets o plug-ins de forma muy intuitiva.
Este servicio y otros se pueden ampliar con planes de pago: en ciertas plataformas low-code y no-code, widgets, plug-ins u otras personalizaciones son accesibles a todos los usuarios mediante planes prémium.
Desarrollar aplicaciones, webs o chatbots no-code y low-code significa lanzar productos básicos más rápido, en un proceso que puede implicar a más departamentos de la empresa, más allá del tecnológico; por ejemplo, en automatizaciones que creen los compañeros de marketing y de atención del cliente. Con gran agilidad se puede tener un producto mínimo viable sencillo que prueben nuevas creaciones.
Las posibilidades del low-code y el no-code son numerosas si quieres agilizar la digitalización o el desarrollo de software en tu negocio. En Plain Concepts recomendamos Microsoft Power Platform como plataforma low-code. Estás a solo un correo electrónico de aprovechar todas sus ventajas.
Elena Canorea
Communications Lead